Bitcoin continúa fortaleciendo su posición en el mercado cripto, alcanzando una cuota del 58 % en octubre de 2024, su punto más alto desde marzo de 2021. En contraste, Ethereum ha disminuido al 13,5 %, un nivel que no se veía desde antes de la fusión de septiembre de 2022. Esta caída marca un retroceso significativo para Ethereum, borrando las ganancias de los últimos años y planteando preguntas sobre su viabilidad y competitividad en un mercado cada vez más desafiante.
La disminución de la cuota de mercado de Ethereum se atribuye a varios factores, incluidos problemas de escalabilidad y las elevadas tarifas de transacción, que aún espera reducir en un 75 % según declaraciones recientes de Vitalik Buterin, cofundador de Ethereum. Además, la competencia de nuevas blockchains más rápidas y eficientes parece estar afectando su posición. Sin embargo, Ethereum continúa siendo el líder en aplicaciones descentralizadas (dApps) y contratos inteligentes, y su transición hacia Ethereum 2.0, que utiliza un sistema de prueba de participación (Proof of Stake), podría mejorar su escalabilidad y reducir costos a largo plazo.
A pesar del auge de Bitcoin, que se ha beneficiado del respaldo de grandes inversionistas y del creciente reconocimiento institucional, la historia de Ethereum aún está lejos de terminar. La plataforma mantiene un rol esencial en el ecosistema cripto, y futuros desarrollos, como la etapa “The Verge”, prometen optimizar aún más su desempeño.