El gobierno de la ciudad de Buenos Aires presentó una modificación de la ley tributaria para incluir la minería de criptomonedas dentro de las categorías que pagan el Impuesto a los ingresos brutos en dicha jurisdicción.
De esta forma, la minería de criptomonedas se esta convirtiendo en una actividad grabada en la Argentina.
El documento, firmado por el Gobernador Axel Kicillof, añade una modificación a la Ley N° 10.397 del Código Fiscal, estableciendo que la actividad formalmente calificada como “Servicios de procesamiento y validación de transacciones de criptoactivos y/o criptomonedas por cuenta propia, en forma colaborativa o bajo cualquier otra modalidad” requerirá de un impuesto del 4%.
Puntualmente, el impuesto se aplicará sobre los ingresos producidos a través de la actividad cuando los equipos se encuentren dentro de la jurisdicción de la provincia.
Cabe resaltar, que en Argentina la minería de criptomonedas ya paga dos impuestos, el IVA, Impuesto al Valor Agregado y un impuesto a las ganancias. Tras ser aprobada por los senadores y diputados provinciales, la ley con la nueva modificación comenzará a regir a partir de enero de 2023.
La normativa no especifica qué clase de equipos entran bajo la categoría, lo que deja en el aire la posibilidad de que abarque tanto la minería de prueba de trabajo (PoW) como la de prueba de participación (PoS). En el primer caso, se requiere el uso de equipos específicos, como ASIC y tarjetas gráficas, mientras que en el segundo solo hace falta un ordenador corriente.
“El impuesto aplicará cuando el equipamiento (hardware) utilizado para el desarrollo de dicha actividad se encuentre ubicado en esta jurisdicción“,
expresa un extracto de la normativa.