En la actual campaña electoral de Estados Unidos, el bitcoin (BTC) y las criptomonedas se han convertido en un tema candente. Donald Trump y el Partido Republicano han adoptado una postura firme a favor de los activos digitales, mientras que Kamala Harris y el Partido Demócrata han suscitado preocupaciones sobre una posible regulación más restrictiva.
Alex Svanevik, CEO de la plataforma de análisis blockchain Nansen, ha afirmado en una entrevista con ‘Cointelegraph’ que, en caso de que Trump gane, se espera un impulso significativo para las criptomonedas en EE.UU. “Si gana Trump, parece bastante claro que eso es muy alcista para el cripto en EE.UU. En el lado opuesto, si nos fijamos en los demócratas y Harris, es básicamente un entorno relativamente hostil para el cripto”, comentó Svanevik, quien también advirtió que podría haber un éxodo de empresas de criptomonedas hacia otros países.
La presidencia de Harris podría continuar con las políticas restrictivas de la administración actual, algo que ha llevado a muchos líderes del sector a considerar seriamente el traslado de sus operaciones fuera de EE.UU. En las últimas semanas, el ‘Financial Times’ ha informado que algunos asesores de Harris han comenzado a acercarse a principales empresas de criptomonedas, como Coinbase, Circle y Ripple, para mejorar las relaciones entre el Partido Demócrata y el sector.
Chris Larsen, presidente ejecutivo y cofundador de Ripple, es uno de los 88 líderes corporativos que han respaldado a Harris, argumentando que ella “promovería políticas justas y predecibles que apoyen el Estado de Derecho y un entorno empresarial sólido.”
A pesar de las tensiones, Standard Chartered ha publicado un informe indicando que el bitcoin alcanzará nuevos máximos históricos sin importar el resultado de las elecciones. No obstante, la firma británica prevé un mayor potencial para la criptomoneda reina en caso de una victoria republicana, estimando que podría superar los 125,000 dólares.
En el caso de una victoria demócrata, Standard Chartered espera que el bitcoin pueda enfrentar una caída inicial, pero anticipa que esta será contrarrestada a medida que se reconozca que el progreso regulatorio seguirá, aunque a un ritmo más lento.
Cabe destacar que Biden vetó recientemente un proyecto de ley bipartidista que buscaba derogar SAB 121, una normativa contable que ha sido criticada por dificultar la relación de las instituciones financieras con las empresas de criptomonedas. Esta normativa obliga a las instituciones a registrar los criptoactivos en sus balances, lo cual es visto como un obstáculo para la adopción más amplia de las criptomonedas.