Durante el Foro Empresarial de la Asociación Estratégica Ruso-India para el Desarrollo y el Crecimiento en Nueva Delhi, el vicepresidente de la Duma Estatal Rusa, Alexander Bobakov, anunció que los estados del BRICS,(economías emergentes con grandes dimensiones geográfica y demográfica) compuesta por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica,están trabajando en la creación de una nueva moneda internacional que no dependa del dólar, y que han tomando medidas significativas para eludir el sistema financiero mundial dominado por Estados Unidos.

Su objetivo es reducir la dependencia del dólar estadounidense y ofrecer una opción financiera global alternativa que pueda ser más justa y equitativa.
“la transición a la liquidación en monedas nacionales es el primer paso. El siguiente es promover la circulación de moneda digital o cualquier otra forma de una moneda fundamentalmente nueva en un futuro cercano”
Según Bobakov
y añade que la nueva moneda se basaría en una estrategia que “no dependa del dólar ni del euro” y estaría vinculada al valor no solo del oro sino también de “otros grupos de productos, minerales de tierras raras o el suelo”.
Los actuales países BRICS ya representan el 40% de la población mundial y una cuarta parte del PIB mundial, y están dispuestos a expandirse con la incorporación de Irán y Arabia Saudita, entre otros.

La primera parte de este proceso, el comercio en monedas nacionales, ya está en marcha, El 29 de marzo, China y Brasil anunciaron que realizarán operaciones comerciales bilaterales en sus monedas locales, el yuan chino y el real brasileño, sin pasar por el dólar estadounidense y Rusia anunció que pagaría con el yuan chino para liquidar el comercio con países asiáticos, africanos y latinoamericanos. China y Francia completaron el comercio de gas LNG utilizando Yuan, poniendo fin a la dependencia del dólar en el comercio de energía.
Los BRICS están logrando avances en su objetivo de liquidar operaciones globales en monedas nacionales y eliminar el dólar estadounidense, si en la próxima cumbre de agosto deciden crear una moneda común para liquidar el comercio mundial, podría haber una caída significativa en la demanda del dólar. Esto debilitaría su posición como moneda dominante en el mundo y sentaría las bases para un nuevo sistema financiero global independiente del dólar. Si otros países se unen a esta iniciativa, el impacto en la posición del dólar sería aún mayor. En consecuencia, el éxito o fracaso de este proyecto dependerá en gran medida de lo que suceda en la próxima cumbre BRICS en Sudáfrica.