El Banco de Pagos Internacionales (BIS) y los bancos centrales de Francia, Singapur y Suiza, concluyeron con éxito el Proyecto Mariana, marcando un hito en la exploración de la interoperabilidad global de los CBDC (Central Bank Digital Currencies) transfronterizos.
Este proyecto de innovación puso a prueba la negociación y liquidación transfronterizas de monedas digitales mayoristas de bancos centrales (wCBDC) entre instituciones financieras, utilizando tecnología financiera descentralizada (DeFi) sobre una blockchain pública.
Desarrollado conjuntamente por tres centros de innovación del BIS y los bancos mencionados, el Proyecto Mariana alcanzó el éxito al probar la negociación y liquidación de hipotéticos wCBDC en euros, dólares de Singapur y francos suizos. Este logro se basó en tres elementos fundamentales:
- Estándar técnico común de tokens: se utilizó una blockchain pública para facilitar el intercambio y la interoperabilidad entre las distintas monedas.
- Puentes para la transferencia fluida: se implementaron puentes para permitir la transferencia sin problemas de wCBDC entre diferentes redes.
- Creador de Mercado Automatizado (AMM): un AMM innovador agrupó la liquidez de wCDBC de diferentes monedas y permitió la negociación y liquidación automáticas de transacciones de divisas al contado.
¿Qué es el proyecto Mariana?
El Proyecto Mariana busca unir la supervisión nacional de los bancos centrales y la eficiencia transfronteriza de las instituciones financieras.
Utilizando un estándar de token común en una cadena de bloques pública, ha facilitado la interoperabilidad y el intercambio fluido de wCBDC a través de diversos sistemas locales de pago y liquidación.
Este proyecto es experimental y no indica necesariamente que los bancos centrales emitan wCBDC o respalden una solución tecnológica específica de DeFi en este momento. Sin embargo, representa un paso importante hacia la exploración de soluciones para mejorar los pagos transfronterizos.
Emmanuelle Assouan, Directora General de Estabilidad Financiera y Operaciones de Banque de France, expresó su entusiasmo por el proyecto y su potencial. “Mariana es un experimento novedoso en varios aspectos”, señaló, destacando la importancia de la interoperabilidad y los creadores de mercado automatizados en el futuro de los CBDC y los pagos transfronterizos.